Unos días te levantas con ganas de comerte el mundo y otros no.
Cuando vivimos un día de los primeros, nos sentimos optimistas y llenos de energía, trabajamos mejor, hacemos mejor las cosas, pensamos en nuestras metas y se nos ocurren nuevas formas de llegar a ellas, somos más creativos. Y hasta sonreímos más.
Nos sentimos conectados con algo que nos mueve y nos impulsa a actuar, a ser más eficientes, más productivos, y, al acostarnos, nos sentimos satisfechos, con la autoestima bien alimentada y con más ganas de continuar al día siguiente. A lo que hace que sea un “día bueno” se le llama Motivación, la ilusión por conseguir algo.
“Cuando estamos de bajón es porque no encontramos motivos”
Por el contrario, en esos días en los que nos sentimos de bajón, que comienzan con incertidumbre, dudas, nos sentimos desmotivados, no conseguimos poner nuestra atención en nada que nos ilusione y lo único que somos capaces de hacer es seguir con nuestro programa en piloto automático, haciendo lo mismo de todos los días, sintiéndonos igual y consiguiendo los mismos resultados.
En estas ocasiones, mejor que no tengas que afrontar ningún reto, ni captar a ningún cliente, ni cerrar ninguna venta o desarrollar ningún proyecto nuevo. Tu energía es tan baja que no te lo permite.
Te dejas llevar por lo que estás acostumbrado a hacer. Así que, cuando el día termina y te acuestas por la noche, no tienes nada de lo que sentirse orgulloso, no hay nada que haya marcado una diferencia, nada que pueda mejorar tu vida. Sientes que no eres capaz, tu autoestima se queda en reserva y si no le pones remedio y empiezas a actuar, te dejará en un callejón sin salida. Porque no encuentras tus razones para moverte, porque no tienes motivos.
¿Te resuenan estas sensaciones?
“Estar motivado es tener razones para actuar.”
No hay más. La vida se hace cuesta arriba cuando no ves una razón, cuando no tienes ilusión.
La motivación nos impulsa a satisfacer nuestras necesidades, por lo que necesitas una motivación en todos los ámbitos de tu vida, a nivel profesional, para desarrollar hábitos saludables, alimenticios, para superarte a ti mismo, para aprender, trabajar, tener relaciones sociales…
La motivación es la patada en el culo que necesitas para ponerte en movimiento.
Detrás de todo lo que hacemos siempre hay un motivo. La motivación es el dedo en el gatillo que dispara la acción. Es el motor que nos mueve, la fuerza con la que hacemos las cosas, la intensidad del deseo que tenemos por lograr algo. El impulso.
Pero ¿Cómo se hace para sentir esa fuerza que te haga moverte y no dejar para mañana lo que quieres hacer hoy?
Primero, identifica tu necesidad. Según el psicólogo Abraham Maslow, la motivación es el impulso que nos lleva a satisfacer nuestras necesidades, este psicólogo, clasificó las necesidades humanas en cinco niveles, dando lugar a la teoría de la Motivación más conocida:
- Necesidades Fisiológicas: comida, agua, sueño, sexo
- Necesidades de Seguridad: física, financiera…
- Necesidades Sociales: amor, amistad, pertenencia
- Necesidad de Estima: logro, respeto
- Necesidades de Autorrealización: crecimiento personal.
A medida que se van satisfaciendo las primeras, van originando las demás.
Esta pirámide, te permite identificar en qué niveles pueden estar las verdaderas necesidades y carencias en tu vida.
¿Cómo conseguir motivarte para lograr tus objetivos?
Lo conseguirás si el fruto del esfuerzo te resulta apetecible.
La motivación personal es una cuestión de energía, la que tienes o no tienes para superar obstáculos, crear nuevos hábitos y tomar decisiones. Esta energía dependerá de la importancia que tiene para ti el resultado a conseguir, de la satisfacción que sientas al conseguirlo.
Dependerá del valor que le des al resultado.
“No a todas las personas nos motivan las mismas cosas, algunas le darán mayor valor a una retribución económica, mientras que otras preferirán más autonomía y tiempo libre”
“La motivación depende de los valores personales y de tu nivel de comodidad. “
Cuando no estamos motivados lo suficiente, cedemos a la presión de nuestra mente, que siempre nos lleva a preferir la comodidad y seguridad de nuestra zona de confort antes que arriesgarnos a crecer y experimentar cosas nuevas.
No todos tienen la misma cantidad de energía, algunas personas se motivan muy fácilmente y están siempre en acción, otras necesitan de un proceso largo para empezar. No cuesta lo mismo arrancar un vehículo que usas todos los días, que un motor que lleva meses parado en el garaje. Cómo todo motor, la motivación necesita energía para funcionar. La clave está en saber con qué tipo de energía arrancamos el motor que nos pone en funcionamiento.
Si has estado teniendo problemas con tu motivación últimamente, probablemente has estado dependiendo de una fuente externa que no controlas:
¿Dónde has puesto tu atención?
¿A dónde ha ido tu energía?
¿Merecía la pena?
La energía que necesitamos para Motivarnos puede venir de dos fuentes:
. La que no controlamos, la Motivación Extrínseca, procede de fuentes externas a nosotros, son las deseadas recompensas: los incentivos salariales, los premios, el reconocimiento social, la aceptación o el amor de los demás. Pero también pueden ser los castigos, el hacer las cosas sin ningún tipo de motivación solo para evitar una consecuencia negativa, el estudiante que no quiere decepcionar a sus padres, el trabajador que no quiere ser despedido…
¿Lo haces para conseguir o lo haces para evitar?
Todo lo que venga de nuestro exterior, está fuera de nuestro Círculo de Influencia y escapa a nuestro control, por tanto, será fuente de frustración y fuga de energía. Buscar motivación en cosas externas es inestable e impredecible. No puedes depender de esta fuente de motivación porque un día la tienes y al siguiente no.
Por tanto, vamos a dejar de ser dependientes de las recompensas y temerosos de los castigos.
“Si necesitas ponerte las pilas tendrás que tener una motivación sólida y eficiente. “
¿Cómo?
. Redirigiendo la energía hacia tu interior, hacia lo que controlamos y depende exclusivamente de nosotros, lo que alimenta nuestra Motivación Intrínseca o Automotivación.
Aprender a automotivarse por sí mismo, implica un cierto proceso de autoconocimiento que nos va a permitir conectar con nuestros deseos más profundos. Lo que nos importa de verdad.
Encontrar lo que te motiva personalmente y crear una meta en base a ello es la mejor estrategia para tener Motivación Intrínseca.
Para que las actividades que hacemos nos permitan auto motivarnos, deben satisfacer tres necesidades universales:
- Necesidad de Autonomía, la necesidad de sentir que tienes el control de lo que haces, es la Independencia.
- Necesidad de Competencia, necesidad de sentir que progresas, que cada vez lo haces mejor
- Necesidad de Propósito, sentir que lo que haces tiene un impacto, un efecto.
Según esta teoría, al satisfacer estas necesidades nos sentimos Automotivados para cumplir con los objetivos que nos interesan.
Ahora, toca ser honesto contigo mismo y preguntarte:
¿Para qué?
¿Para qué quiero hacer lo que hago?
¿Qué beneficio trae a mi vida?
¿Qué obtengo con ello?
¿Por qué es importante para mí?
Las respuestas a estas preguntas te conectarán con tus valores personales más importantes.
“Los valores personales nos inspiran y son la fuente de motivación personal más poderosa.”
Ellos están detrás de las decisiones que tomamos. Te conectan con tu Visión de vida. A través de la visión encuentras tu Misión, el camino, el cómo. Cuántos emprendedores han conectado con su visión y misión a través de sus valores, y han tenido clara su Identidad cómo empresa. Quienes son. Y han encontrado la motivación y los recursos para seguir adelante movidos por un propósito.
“Las recompensas por aprender a Automotivarte son las más bonitas: un gran amor propio, confianza en ti mismo, satisfacción y orgullo personal.”
Solo tú puedes darte estos premios.
Y, además, es aquella que nos hace hacer las cosas por el gusto de hacerlas.
A través de la automotivación podemos superar los bajones, los días malos y la incertidumbre. Porque sabemos nuestro por qué, nuestra meta, lo que quieres lograr en tu vida.
Y, si aun así no consigues arrancar, te cuento el truco:
Actúa, hazlo, ¡ya!
No esperes a estar motivado para empezar.
Empieza y la motivación aparecerá, se trata de tomar acción para darle paso a la motivación.
Cuántas veces empezamos una actividad sin ganas y de repente nos vemos inmersos en ella…
Reprográmate, evita los círculos viciosos que te apartan de tus objetivos, de la alegría y satisfacción de saber lo que quieres y ve a por ello. Reflexiona qué es lo que de verdad necesitas y que te mueve a conseguirlo. Conecta con tus verdaderos valores y enciende esa llama que te hace sentir ilusión y te pone en funcionamiento.
Ahora que ya sabes la mejor manera de motivarte, toca ser persistente y resiliente, tirar de fuerza de voluntad para sortear obstáculos. Pero de eso, hablaremos en el próximo artículo.
El Coaching y la Programación Neurolingüística ayudan a descubrir las verdaderas motivaciones, las verdaderas prioridades en la vida para marcar objetivos que nos hagan avanzar y crecer cómo personas.
Y a ti, ¿qué te motiva?
¡Feliz semana!
Carolina Collado.
Coach Personal y Ejecutiva acreditada ACC por ICF.
Inteligencia Emocional. Programación Neurolingüística.
www.carolinacollado.es
And, What is it that motivates you?
Some days you wake up wanting to eat the world and others not.
When we live one of the first days, we feel optimistic and full of energy, we work better, we do things better, we think about our goals and we come up with new ways to reach them, we are more creative. And we even smiled more.
We feel connected to something that moves us and drives us to act, to be more efficient, more productive, and, when we go to bed, we feel satisfied, with well-nourished self-esteem and more eager to continue the next day. What makes it a «good day» is called Motivation, the illusion of achieving something.
“When we are down it is because we cannot find reasons”
On the contrary, on those days when we feel down, which begin with uncertainty, doubts, we feel unmotivated, we are unable to pay attention to anything that excites us and the only thing we are able to do is continue with our program in autopilot, doing the same thing every day, feeling the same and getting the same results.
On these occasions, it is better that you do not have to face any challenge, nor attract any client, nor close any sale or develop any new project. Your energy is so low that it does not allow it.
You let yourself go by what you are used to doing. So, when the day ends and you go to bed at night, you have nothing to be proud of, nothing that has made a difference, nothing that can improve your life. You feel that you are not capable, your self-esteem remains in reserve and if you do not remedy it and start to act, it will leave you in a dead end. Because you can’t find your reasons to move, because you don’t have reasons.
Do these sensations resonate with you?
“To be motivated is to have reasons to act.”
There’s no more. Life becomes uphill when you don’t see a reason when you don’t have hope.
Motivation drives us to satisfy our needs, so you need motivation in all areas of your life, professionally, to develop healthy eating habits, to improve yourself, to learn, work, have social relationships…
“Motivation is the kick in the ass you need to get moving.”
Behind everything we do there is always a reason. Motivation is the finger on the trigger that triggers the action. It is the engine that moves us, the strength with which we do things, the intensity of the desire we have to achieve something. Momentum.
But how do you feel that force that makes you move and not leave for tomorrow what you want to do today?
First, identify your needs. According to psychologist Abraham Maslow, motivation is the impulse that leads us to satisfy our needs. This psychologist classified human needs into five levels, giving rise to the best-known theory of motivation:
- Physiological needs: food, water, sleep, sex
- Security Needs: physical, financial
- Social Needs: love, friendship, belonging
- Need for Esteem: achievement, respect
- Self-actualization needs: personal growth.
As the first ones are satisfied, the others are originated.
This pyramid allows you to identify at what levels the true needs and deficiencies in your life may be.
How can you motivate yourself to achieve your goals?
You will achieve it if the fruit of the effort is appealing to you.
Personal motivation is a question of energy, the energy you have or don’t have to overcome obstacles, create new habits and make decisions. This energy will depend on the importance that the result to achieve has for you, on the satisfaction you feel when you achieve it.
It will depend on the value you give to the result.
“ Not all people are motivated by the same things, some will give greater value to economic compensation, while others will prefer more autonomy and free time”
“Motivation depends on personal values and your comfort level. “
When we are not motivated enough, we give in to the pressure of our mind, which always leads us to prefer the comfort and security of our comfort zone rather than risk growing and experiencing new things.
Not everyone has the same amount of energy, some people are very easily motivated and always on the go, others need a long process to get started. It does not cost the same to start a vehicle that you use every day, than an engine that has been sitting in the garage for months. Like any engine, motivation needs energy to work. The key is to know what type of energy we use to start the engine that puts us into operation.
If you’ve been having trouble with your motivation lately, you’ve probably been depending on an outside source that you don’t control:
Where have you put your attention?
Where has your energy gone?
Was it worth it?
The energy we need to motivate ourselves can come from two sources:
. The one that we do not control, the Extrinsic Motivation, comes from sources external to us, they are the desired rewards: salary incentives, prizes, social recognition, acceptance or love from others. But it can also be punishments, doing things without any motivation just to avoid a negative consequence, the student who does not want to disappoint his parents, the worker who does not want to be fired…
Do you do it to get or do you do it to avoid?
Everything that comes from outside of us is outside our Circle of Influence and beyond our control, therefore, it will be a source of frustration and energy drain. Look for motivation in external things
it is unstable and unpredictable. You can’t depend on this source of motivation because one day you have it and the next you don’t.
Therefore, we will stop being dependent on rewards and fearful of punishments. If you need to get your batteries going you will have to have a solid and efficient motivation.
How?
. Redirecting the energy inside you, towards what we control and depends exclusively on us, which feeds our Intrinsic Motivation or Self-motivation.
Learning to self-motivate by oneself implies a certain process of self-knowledge that will allow us to connect with our deepest desires. What really matters to us.
Finding what motivates you personally and creating a goal based on it is the best strategy to have Intrinsic Motivation.
For the activities we do to allow us to self-motivate, they must satisfy three universal needs:
- Need for Autonomy, the need to feel in control of what you do, is Independence.
- Need for Competence, need to feel that you are progressing, that you are doing better and better
- Need for Purpose, to feel that what you do has an impact, an effect.
According to this theory, by satisfying these needs we feel self-motivated to fulfill the objectives that interest us.
Now, it’s time to be honest with yourself and ask yourself:
What for ?
Why do I want to do what I do?
What benefit does it bring to my life?
What do I get with it?
Why is it important to me?
The answers to these questions will connect you with your most important personal values.
“Personal values inspire us and are the most powerful source of personal motivation.”
They are behind the decisions we make. They connect you with your Vision of life. Through vision you find your Mission, the way, the how. How many entrepreneurs have connected with their vision and mission through their values, and have been clear about their Identity as a company. Who they are. And they have found the motivation and resources to move forward with a purpose.
“The rewards for learning to motivate yourself are the most beautiful: great self-esteem, self-confidence, satisfaction and personal pride.”
Only you can give yourself these prizes.
And besides, it is the one that makes us do things for the pleasure of doing them.
Through self-motivation we can overcome downturns, bad days and uncertainty. Because we know our why, our goal, what you want to achieve in your life.
And, if you still can’t start, I’ll tell you the trick:
Act, do it, now!
Don’t wait to be motivated to start.
Start and motivation will appear, it’s about taking action to give way to motivation.
How many times do we start an activity without desire and suddenly we find ourselves immersed in it…
Reprogram yourself, avoid the vicious circles that separate you from your goals, from the joy and satisfaction of knowing what you want and go for it. Reflect on what you really need and what moves you to get it. Connect with your true values and light that flame that makes you feel excited and puts you in motion.
Now that you know the best way to motivate yourself, it’s time to be persistent and resilient, use your willpower to overcome obstacles. But we will talk about that in the next article.
Coaching and Neurolinguistic Programming help discover the true motivations, the true priorities in life to set goals that make us move forward and grow as people.
And you, what motivates you?
Happy week!
Carolina Collado.
Personal and Executive Coach, accredited ACC por ICF.
Emotional Intelligence. Neurolinguistic Programming.
www.carolinacollado.es