
El primer sábado de septiembre, concretamente el día 2, un grupo de jóvenes interpuso una denuncia por homofobia en Fuengirola después de que se les impediera la entrada a una discoteca de la localidad, según ellos, por pertenecer al colectivo LGTBI+.
Doce amigos de unos 21 años estaban de vacaciones en Benalmádena y decidieron salir a una discoteca de Fuengirola. Se dividieron en dos grupos para entrar al local: mientras que el primero, todo de chicas, entraron al local sin problemas, el segundo, con cuatro chicos, no pudieron entrar. Según los porteros «no cumplían con las normas de vestimenta establecidas», aunque ellos están convencidos de que se trata un caso de homofobia. Así lo han contado a la Ser.
Según los afectados, no les dejaron entrar por ir uno con camiseta de tirantes de rejilla y al otro por ir con bolso, así que decidieron pedir las normas de vestimenta y llegaron a tener una trifulca con los porteros, quienes los insultaron y amenazaron, sin recibir apoyo ni ayuda por parte del resto de personas esperando para entrar al local.
Tras hablar con los responsables de seguridad durante un buen rato, lograron interponer la hoja de reclamaciones, y tuvieron el apoyo de la Policía Local que acudió hasta el lugar.
Un caso que no es aislado, ya que las denuncias por delitos de odio y discriminación aumentaron el año pasado un 3,7% en España, según los datos del Ministerio del Interior.