Conocieron a la víctima en una discoteca de Málaga en 2020, se ofrecieron a acompañarla a casa e intentaron entrar en la vivienda con la excusa de que querían descansar, se les negó dicho acto, por lo que forzaron su entrada dentro del portal del edificio, donde presuntamente violaron a la joven de 18 años en varias ocasiones.
La Audiencia de Málaga tiene previsto juzgar esta semana a dos hombres a los que la Fiscalía acusa de varios delitos de agresión sexual por la presunta violación conjunta a una joven, a la que habían conocido en una discoteca, en el portal de una vivienda en la capital malagueña. Pide que se le imponga a cada uno 22 años y medio de prisión y que indemnicen a la joven con 100.000 euros.
Los hechos sucedieron en julio de 2020. La acusación pública relata en su escrito, al que ha tenido acceso Europa Press, que la chica, con 18 años en ese momento, estaba en una discoteca de Málaga con un grupo de amigas y, tras cruzar varias miradas con uno de los acusados, fue invitada por este a ir al reservado del local donde estaba con el otro procesado.
Fue junto a una amiga y ambas intercambiaron varios besos con los acusados hasta que la acompañante se volvió con un grupo de amigos y la víctima hizo lo mismo con el fin de irse directamente a la vivienda en la que estaba hospedada en la ciudad. Entonces, dice el fiscal, el primer acusado se ofreció a acompañarla a casa y el otro les acompañó.
Una vez que llegaron a la puerta del edificio, el primer acusado, «previamente concertado» con el otro, pidió a la chica que le dejara entrar para descansar, a lo que ella se negó; aunque cuando abrió la puerta ambos hombres, según dice el ministerio fiscal en sus conclusiones iniciales, «aprovecharon para introducirse inmediatamente detrás de ella».
El ministerio público dice que los acusados se interpusieron para que la joven no subiera las escaleras del portal y, presuntamente comenzaron, primero uno y luego otro, a hacerle tocamientos y a besarla sin su consentimiento, tras lo que supuestamente la violaron, «intercambiándose cada agresor sus posiciones», señala el escrito, apuntando que esto «se repitió en varias ocasiones».
Según esta acusación, cuando ambos terminaron se dirigieron «entre risas» a la víctima y se marcharon del lugar. La mujer presenta, según precisa la calificación inicial, varios trastornos psicológicos y emocionales, por los que precisó tratamiento.
Para la Fiscalía, se trata de cuatro delitos de agresión sexual con violencia, dos de ellos con la circunstancia que agrava la pena de ejecución del hecho con actuación conjunta de dos. Además de prisión y el pago de la indemnización, solicita que se le imponga a cada acusado diez años de libertad vigilada y la prohibición de acercarse o contactar con la víctima durante 25 años.
El juicio se ha fijado para celebrarse inicialmente este próximo miércoles, día 12 de julio, en la Sección Primera de la Audiencia malagueña, han informado fuentes judiciales.