
La Fiscalía de Málaga lleva la investigación del caso después de que un niño de tan solo dos años de edad recibiera un ‘perdigonazo’ de una escopeta de aire comprimido muy cerca del ojo mientras estaba jugando en un parque de Málaga.
El suceso se produjo el pasado mes de mayo pero no ha trascendido hasta este miércoles y el niño tuvo que ser atendido en el hospital materno infantil después de sufrir el impacto que le rozó prácticamente el ojo y que se le quedó incrustado en la zona de la mejilla sin que por el momento se sepa el autor o autores del incidente en la zona de Campanillas.
Jugaba con su hermano
El pequeño jugaba con su hermano de 10 años de edad cuando recibió el disparo y se investiga desde donde pudo proceder no descartándose que el autor fuese un menor.
Precisamente según fuentes de la investigación en la barriada hay menores que se dedican a cazar pájaros con escopetas de perdigones. En la Costa del Sol, en 2016, un menor en Torremolinos de 15 años, fue imputado por causar lesiones a dos mujeres de 17 y 65 años por utilizar una escopeta de aire comprimido con balines.