
La Asociación de Empresarios Hoteleros de la Costa del Sol (AEHCOS) estima que el mes de junio cerrará con una ocupación hotelera media del 82,12%, un dato muy similar al alcanzado en 2022 (81,80%), aunque aún por debajo de los niveles prepandemia.
El presidente de la patronal hotelera malagueña, José Luque, ha calificado de «preocupante» estas cifras, al considerar que reflejan «el estancamiento que viene experimentando el sector desde mediados del mes de mayo», fruto de la subida de tipos de interés y de la inflación.
A ello se suma una caída en la rentabilidad de los establecimientos, que se refleja en el descenso del IBCA (Impacto Bruto medio por Cliente Alojado) de un 7,3% durante el mes de junio.
Vuelve a cobrar importancia la presencia del turismo extranjero con un 70% del total de la ocupación, por el 30% que supone el turismo nacional.
Por destinos, Mijas lidera el nivel de ocupación en junio, alcanzando el 87,55%, seguido muy de cerca por Fuengirola con un 87,01%. Málaga capital (84,35%), Nerja (84,29%) y Marbella (84,12%), han sido los otros tres destinos con gran acogida en este mes.
Previsiones julio y agosto
Las previsiones de AEHCOS para los meses más fuertes de la temporada alta apuntan a un descenso con respecto al año pasado. Así, en julio se alcanzará un 82,18%, frente al 86,29% de 2022, mientras que en agosto se prevé una ocupación de 80,83% frente al 88,08% del pasado año.
“Son claramente, cifras inferiores a las del 2022 y que muestran este estancamiento que venimos experimentando», apunta Luque, quien destaca que «también influye de manera negativa la convocatoria de elecciones generales«.