
El cielo de la provincia de Málaga ha amanecido este miércoles cubierto de materia en suspensión, partículas de hollín procedentes de los incendios forestales que están arrasando Canadá y que han logrado cruzar el Atlántico y llegar a Europa.
Esta nube de hollín llegó en primer término a la parte más occidental de Andalucía. Desde la noche del martes se empezó a notar en Málaga y este miércoles ya lo hace con más intensidad en toda la provincia malagueña. «Sí, ya nos está afectando y se nota en esa opacidad que hay en al atmósfera», ha confirmado a Europa Press el director del Centro Meteorológico de la Agencia Estatal de Meteorología en Málaga, Jesús Riesco.
Nos acompañará durante esta jornada y la del jueves.
Estas partículas de hollín están presentes en capas altas y no en superficie, por lo que «no representa, en principio, nada peligroso» para los ciudadanos ya que no afecta a la calidad del aire.
Una situación que ya ha pasado en otras ocasiones, como la del año pasado con una nube de erupciones volcánicas de Sudamérica.