
El frente lluvioso abandona la Costa del Sol para dejar paso a la primera subida importante de temperaturas de la primavera, y que empezará a notarse este viernes.
La Agencia Estatal de Meteorología prevé para mañana cielos poco nubosos, con vientos flojos de dirección variable, y temperaturas máximas de 25 grados. Las mínimas durante la madrugada no bajarán de los 13 grados.
Pero será el sábado cuando disfrutemos de un ambiente casi de verano: la máxima prevista por AEMET alcanzará los 28 grados y las mínimas no bajarán de 14, debido a la entrada de viento de poniente. Los cielos seguirán despejados durante la jornada, al igual que el domingo.
Para el último día del fin de semana se mantendrá un tiempo estable con máximas de 23 grados, que volverán a subir hasta los 26 grados el lunes. La estabilidad meteorológica se mantendrá al menos hasta el viernes.
Además, a partir de este mismo viernes ya se espera una subida de los niveles de radiación solar. El índice ultravioleta, que ha estado en niveles moderados, pasa a ser alto desde este viernes, por lo cual las personas con problemas de piel deberán empezar a protegerse.