
Dani García, el chef malagueño de éxito, considerado uno de los cocineros españoles con mayor proyección internacional, considera que la ciudad de Málaga «tiene aún mucho que ofrecer» desde el punto de vista gastronómico y que, aunque ha mejorado en los últimos años, sigue lejos de nivel de otras ciudades como Marbella.
El cocinero nacido en Marbella, cuenta con más de veinte años de experiencia entre fogones, consiguió en 2019 las tres estrellas Michelin para su restaurante marbellí, aunque solo tres semanas después anunció el cierre del local para centrarse en la exportación de la cocina española por todo el mundo.
«Mi sueño a partir de ahora es estar un domingo paseando por Marbella sabiendo que medio mundo está disfrutando mi gazpacho de cereza o mi brioche rabo de toro» aseguró el chef en referencia a dos de sus creaciones más populares. García, cuenta actualmente con una veintena de restaurantes en ciudades como Madrid, Dubái, Nueva York, Doha o Ibiza.
En 2021, su restaurante Smoked Room en Madrid, logró dos estrellas Michelin seis meses después de su apertura. Dani García, si de algo sabe, es de cocina, de ahí que crea que Málaga, ciudad de moda que lidera el crecimiento económico en Andalucía, aún tenga un largo camino que recorrer.
«En la vida siempre hay mil millones de cosas por mejorar, pero creo que a nivel gastronómico Málaga tiene aún muchas cosas por hacer», opina el galardonado chef, quien asegura que la capital malagueña «no tiene el nivel de Marbella», desde el punto de vista culinario.
«En Málaga debería haber muchas más estrellas Michelin y ahora mismo solo hay dos. Es verdad que hay un grupo de gente haciendo cosas increíbles, pero creo que es poca para lo que debería haber. Málaga todavía puede evolucionar, a nivel gastronómico creo que podría mejorar mucho», subraya el chef marbellí en una entrevista con EFE.
Para García, dos de las claves del éxito malagueño son el mar y su clima. También la implantación de multinacionales del ámbito tecnológico como Google, Vodafone u Oracle, han contribuido al impulso de Málaga y a la llegada de los nómadas digitales, principalmente extranjeros, apunta el chef, que cree que la pandemia «ha venido muy bien» a la ciudad en este sentido.
Que Málaga tenga éxito, es innegable y constatable, pero el laureado cocinero, acostumbrado a gestionar la fama culinaria desde hace años, advierte que «tan peligroso es el exceso de éxito como el fracaso».