
El incendio de este martes tuvo en vilo a la ciudad entera de Estepona, después de que un fuego producido en la zona del Seghers corriera como la pólvora y llegara hasta el polígono industrial. Esto ha llevado a vecinos, partidos políticos y sindicatos a pedir soluciones y medidas que eviten un nuevo incendio, ya que se este verano están a la orden del día. Según ha comentado CSIF, desde hace años llevan advirtiendo por parte de los propios agentes del riesgo de incendios que conlleva mantener «sin limpiar ni desbrozar la parcela norte contigua a la nave que alberga el gimnasio de la Jefatura», que según ellos se libró por los pelos de ser quemada. Ahora, ha pedido que se refuercen los controles policiales las 24 horas en los accesos a Sierra de Estepona y también al Parque de los Pedregales por ser los dos puntos «más problemáticos» y donde existe mayor riesgo de que actúen pirómanos o que por negligencia de las personas usuarias se pueda desencadenar un incendio.
Asimismo, ha vuelto a reclamar la recuperación de la Patrulla Verde con al menos 4 efectivos, dos para la zona Este y dos para la zona Oeste del municipio, «donde se concentran en zonas rurales gran cantidad de personas y donde hay un potencial riesgo de daños en la fauna y flora de las zonas verdes que aún quedan».
Desde el sindicato, han lamentado «el mal estado en general de las instalaciones municipales y de la Jefatura de Policía en particular»: «Ausencia de cámaras de seguridad, zona de almacenamiento de armas sin control ni puerta de acceso, picaderos reconvertidos en aparcamientos y taller de coches, goteras en las cubiertas del edificio, suciedad o insalubridad, zonas inundables con cuadros eléctricos accesibles al agua, y un sinfín de anomalías».
«Que se averíe una fuente recién inaugurada como la nueva fuente ornamental colocada hace unos días en la rotonda de entrada a Estepona a la altura del Colegio San José, es algo que pueden suceder y que con un taladro abriendo nuevos agujeros o haciéndolos más grandes se apaña el problema. Por el contrario, cuando el patrimonio municipal y los montes arden no valen los apaños postreros, solo sirve la prevención y para eso tienen que tomarse medidas no fiarlo todo a la suerte, al devenir de la climatología o al capricho de un pirómano».
CSIF