La mujer que falleció en la playa de La Rada se llamaba Flora y quería disfrutar de su jubilación en Estepona

Hace dos días, publicábamos la trágica noticia de un fallecimiento en las aguas de Estepona. Una mujer de 62 años moría ahogada cuando disfrutaba de un baño en la playa de La Rada, a la altura de la oficina de Correos. Se trataba de Flora Ruiz, una madrileña que acudía siempre en vacaciones a disfrutar de la ciudad, ya que, según ha comentado el marido a este medio, les encantaba. Este miércoles, su marido, Ignacio León, escribía un comunicado en redes sociales explicando lo ocurrido y que se dirigía a la Comisaría de Policía Nacional a recoger sus efectos personales, sin entender muy bien cómo había podido suceder. «La idea de nuestra jubilación era Estepona, que es maravillosa», nos ha declarado.

Hace veinte años, Ignacio y Flora decidieron elegir Estepona como destino turístico para pasar sus vacaciones de agosto con otro matrimonio amigo: «Lo pasamos fenomenal. Tanto, que nos compramos dos casas en la Urbanización Aguamarina, en la zona del Seghers. Y desde entonces, cuando hemos tenido un puente o vacaciones, ya no hemos querido ir a otro sitio«.

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Una mujer que, al igual que su marido, estaba enamorada de la gente, el clima, el mar, la montaña y la cercanía con otros lugares interesantes. «Cuando pasó la primera quincena de julio, me dijo que ya no me esperaba más y se fue a Estepona. Yo tenía que estar en Alcalá de Henares y hasta hoy no tenía previsto venir», ha descrito Ignacio, que se encuentra roto de dolor tras la pérdida de su esposa.

Su playa favorita era la del Cristo, «una joya», tal y como lo describe su marido. La mayoría de veces se iba a esa playa.

Según nos ha comentado, la causa de la muerte que le han comunicado es «ahogamiento por asfixia», pero no sabe el motivo que pudo originar el trágico desenlace, ya sea un golpe de calor o un corte de digestión.

«Cada paso que doy por las calles y por la casa, tiene flotando su recuerdo y la infinidad de alegría que nos ha dado este pueblo y sus gentes. Dedicaré mis pensamientos a los buenos momentos vividos juntos, muchos de ellos en esta hermosa ciudad».

Ignacio ha agradecido a la gente los mensajes de apoyo y el esfuerzo por parte de los sanitarios y agentes de policía que intentaron salvarle la vida: «He recibido centenares de apoyos y testimonios directos que me hacen saber que su vida aún estuvo una hora en manos deseosas de recuperarla. Gracias a todos»