
Los transportistas que secundan el parón indefinido convocado por la Plataforma en Defensa del Sector del Transporte siguen al pie del cañón. Tanto es así que que van a trasladar sus reivindicaciones por «todo lo alto» en la capital española, lugar de encuentro que se darán todos los afectados el próximo viernes.
Bajo el lema de «No somos la minoría«, estos profesionales se reunirán en la Plaza de la Castellana a las 10:00 horas para llevar a cabo una concentración que tome las calles de Madrid para que se recuerde históricamente por el cambio que tanto desean, «queremos trabajar sin perdidas y que nos salga rentable salir», explican en todas y cada una de sus intervenciones.

«Reivindicamos el pan de nuestra casa»
El anuncio por parte del Gobierno de la bonificación de 500 millones de euros para los transportistas ha dejado mucho que hablar, y sobre todo, «bastante» que reivindicar. Los profesionales del sector del transporte que hoy siguen avivando la llama del parón, en su noveno día desde su inicio, lo han dicho alto y claro «con ese dinero lo único que quieren comprar es nuestras voluntades». Por lo que aseguran continuar con esta huelga para alcanzar sus derechos, que no es otro que el «pan de sus casas».
Y es que, este tipo de «compensación» como así lo define el propio Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana, para los transportistas de la Plataforma en Defensa del Sector del Transporte no les supondría ningún cambio en comparación a la situación que viven hoy en día.
«Cuando se pongan a repartir ese dinero entre 400.000 o 500.000 vehículos que hay en España, no van a dar las cuentas. Serían 1.000 euros, si no se pierde nada por el camino, para cada camión. Yo con ese dinero a mi camión le lleno el tanque y la semana que viene estoy en las mismas condiciones que antes, hago únicamente una semana de trabajo y a la que viene ya estoy perdiendo dinero», explica Pablo Iglesias a nuestro compañero Paco Campaña.
Es por esta razón, tal y como afirman, por la que el parón no cesa, y no lo hará hasta que la ministra, Raquel Sánchez, decida reunirse con la organización para conversar acerca de las reivindicaciones que tanto pide y anhela este sector que se ha volcado en conseguir «sus derechos».